El reciente Análisis sobre los Mercados de Droga en la UE 2024 señala que cada vez están disponibles más tipos de drogas, las cuales presentan una mayor calidad. Este estudio, realizado por el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT) y Europol, destaca también un aumento en la eficiencia del transporte de estas sustancias, así como una resistencia significativa a crisis mundiales y cambios político-económicos.
Esta expansión de la disponibilidad de drogas supone un desafío en términos de prevención. Infor Drogues & Addictions en Bélgica, recibe anualmente alrededor de 2.000 llamadas de consumidores y familiares preocupados por posibles adicciones. A pesar de tratar diversas drogas, la marihuana es la principal causa de consulta, a pesar de su ilegalidad en gran parte de los países de la UE.
Recientemente, Alemania ha dado pasos hacia la legalización del cannabis para uso recreativo, lo que podría cambiar el panorama de la prevención. Para Fanny Bétermier, encargada de comunicación de Infor Drogues & Addictions, esto facilitaría la reducción de riesgos para el público en general, al eliminar la vergüenza asociada a la admisión del consumo de una droga legal.
Por otro lado, el director de la OEDT, Alexis Goosdeel, reconoce que el impacto real de estas medidas es aún desconocido. A pesar de los intentos por cortar el acceso de organizaciones criminales al mercado del cannabis, los países de la UE deberán adaptar sus políticas y estrategias para hacer frente a estos nuevos desafíos.
El mercado de drogas en la UE y su impacto
El valor total del mercado de drogas europeo asciende a 31.000 millones de euros, siendo el cannabis la droga con mayor cuota de mercado, representando el 39% del total y 12.100 millones de euros. La cocaína, por su parte, sigue de cerca al cannabis con un 37% de participación y 11.600 millones de euros.
La marihuana es la sustancia ilegal más consumida en la UE, con un 8% de adultos europeos habiendo hecho uso de ella en el último año. Esta droga es producida mayoritariamente en España, lo que conlleva un impacto ambiental significativo debido al consumo de energía y agua, así como a la polución química generada.
En cuanto a la cocaína, su consumo está en alza en la UE debido a la disponibilidad de droga de bajo coste y alta pureza. Además, la Unión Europea se está convirtiendo en un punto de tránsito importante para el envío de cocaína a otras regiones, siendo utilizada también como laboratorio en algunas fases de la producción de esta sustancia.
La violencia relacionada con las drogas en la UE
El aumento en la disponibilidad de drogas ha incrementado la competencia entre los traficantes, lo que ha derivado en un aumento de la violencia relacionada con las drogas en toda Europa. La presión sobre los actores del mercado ilícito de drogas es cada vez mayor, generando situaciones de peligro para la población.
Este incremento de violencia no es nuevo, ya que comenzó hace una década atrás, especialmente en torno al mercado del cannabis en Europa. La interconexión entre el mercado de drogas, el tráfico de armas y el blanqueo de capitales ha generado un escenario complejo en el que la violencia se ha vuelto una constante en diversos países de la UE.
En definitiva, los desafíos en la lucha contra el narcotráfico en la Unión Europea requieren de estrategias y acciones coordinadas a nivel nacional e internacional para hacer frente a una problemática que va en constante evolución y que plantea serios riesgos para la salud y seguridad de la población.
