Luis Sánchez Cerro fue un militar peruano que dio inicio a la época del Perú del Tercer Militarismo. Con su origen indígena y condición de hombre de provincia supo conquistar a las masas populares y sectores de la oligarquía del país.
Luis Sánchez Cerro
Fue el líder del movimiento que dio fin al gobierno del oncenio de Augusto B. Leguía, posteriormente presidiría la junta militar de gobierno entre 1930 y 1931. Hasta llegar a la presidencia por elección, la cual ejercería durante el período 1931 – 1933, tras ser asesinado.
Luis Miguel Sánchez Cerro fue un militar peruano que incursionó en la política de su país. Nace en la localidad de Piura un 12 de agosto de 1889. En 1914 con el rango militar de teniente, participa en la insurrección militar que derroca al entonces presidente Guillermo Billinghurst. Fue juez militar en Cuzco, donde se inició una rebelión fracasada contra la presidencia de Augusto B. Leguía en el año de 1922
Exiliado en el extranjero se interesó e ingresó a la Legión española en Marruecos, siendo herido. También formó parte del ejército de Italia en 1925, así como cursó estudios militares en Francia en 1926.
De vuelta al Perú, desempeña labores en cargos militares destacados. Nuevamente lidera un levantamiento militar contra el presidente Leguía, y lo derroca en 1930.
Posterior al derrocamiento, organiza y preside la Junta de Gobierno Militar. Le corresponde entonces el llamado a elecciones en noviembre de 1931. En las cuales y con unos resultados controversiales, se alza con la presidencia de la República del Perú. Luis Sánchez Cerro inicia su gobierno con la resistencia del aprismo, que nunca consintió en su victoria electoral.
Inicio del tercer Militarismo en el Perú
Con la instalación de Luis Sánchez Cerro en el poder de la nación, se inicia el tiempo político en la historia del Perú, conocida como el Tercer Militarismo. Tiempo durante el cual, el rol militar fue amenazante, bien sea en los gobiernos militares, así como en los civiles beneficiados por las fuerzas armadas.
Esto fue muy típico de ver en la actuación castrense en la política de los países de América Latina de esos tiempos.En este contexto, se puede concluir que el tercer militarismo del Perú en los años 30 del siglo XX, se ajustó efectivamente a un intervencionismo militar.
De esta forma, primero con Sánchez Cerro y posteriormente con Óscar Benavides, el gobierno y la sociedad del Perú, se enfilaron hacia un nuevo cambio de las relaciones cívico militares
Considerando que el sector militar intervino de forma excesiva en los asuntos de política que no eran de competencia política para el sector castrense.
La administración del poder en manos de Sánchez Cerro, se basó en el contexto de una complicada situación política dominada por movimientos insurreccionales, que tiene su origen en la insurgencia ocurrida en Trujillo en julio de 1932.
El primer atentado a Sánchez Cerro y su posterior muerte en abril de 1933 perpetrado por un militante del APRA. Destaca que los años de 1932 y 1933 para el Perú, fueron de una implícita guerra civil.
Que se inició con una tentativa de subversión en el puerto del Callao, donde supuestamente estuvieron involucrados militantes del APRA. (ver artículo: Alan García)
Tras el asesinato del presidente Luis Sánchez Cerro llevado a cabo por un partidario del aprismo, le sucede en la presidencia el general Óscar Benavides. El cual fue elegido por el Congreso, violando la Constitución Nacional para concluir el mandato de Luis Sánchez Cerro.
Biografía
Luis Sánchez Cerro nace el 12 de agosto de 1889, en Piura en la región norte occidental del Perú. Sus padres fueron Antonio Sánchez y Rosa Cerro, su infancia la vivió en su ciudad natal, donde veía de cerca los conflictos limítrofes entre el Perú y el Ecuador. Que fueron muy agitados en las últimas décadas del siglo XIX.
Sus primeros estudios los realizo en el colegio nacional san Miguel. Viaja a la capital limeña en 1906 para iniciar la carrera militar en la Escuela de las fuerzas armadas de Chorrillos.Egresa como Subteniente de Infantería del ejército en 1910.
Hombre de Armas
Al salir de la escuela militar Luis Sánchez Cerro, solicita ser destacado en Sullana, donde existía un cuartel de guarnición de la frontera con el Ecuador.En 1911 es transferido a Sicuani región del Cuzco. Posteriormente a la ciudad de Lima en 1912.
Se involucra en la revolución de 1914, donde es derrocado el presidente Billinghurst. En este conflicto pierde dos dedos de su mano derecha por herida de bala, ganando el apodo de “El Mocho”.Tras su ascenso a Capitán es enviado a Washington como adjunto militar de la legación peruana, durante 1914 y 1916.
Alzamiento militar de 1922
De regreso al Perú es asignado a regimiento Nº 11, ubicado en Arequipa. Posteriormente es enviado de vuelta a Sicuani, y luego al Cuzco como Juez militar.
Desde esta posición en 1922, encabeza un levantamiento militar contra el gobierno de Leguía. Pero fue vencido, herido y colocado en prisión en la isla de Taquile, en el Lago Titicaca. Trasladado luego a la de san Lorenzo frente al Callao.
En 1925 y tras el dictamen de amnistía del presidente Leguía, Luis Sánchez Cerro retorna al ejército peruano, con el rango de mayor y como ayudante del Ministerio de Guerra.
Hace las paces con el gobierno
En el movimiento de sublevación de las Pampas en el Cuzco, Sánchez Cerro toma contacto con los rebeldes y los vuelve al redil.El gobierno de Leguía lo premia enviándolo a Europa, en condición de realizar estudios de mejoramiento profesional.
Regresa al Perú en 1929, ascendiendo al rango de Teniente Coronel, obtiene entonces el comando de un batallón en Arequipa.Un año después se agrava la crisis política en el Perú tras once años de gobierno de Leguía. Además de la crisis económica mundial que venía desde finales de 1929.
Los conflictos fronterizos con Chile, la aparición de nuevas organizaciones partidistas como el APRA y el Partido Comunista, caldearon el escenario político económico del Perú. Encaminando al país al fin del gobierno de la patria nueva de Leguía.
Derrocamiento de Leguía
Luis Sánchez Cerro sería en encargado de dar el golpe final al gobierno del oncenio de Leguía. El 22 de agosto de 1930, lidero en Arequipa la denominada Rebelión de los Coroneles. Siendo esta la primera acción militar peruana contra la oligarquía en el poder.
Sánchez Cerro rápidamente obtuvo el respaldo popular. A su llegada de Arequipa al aeropuerto de Lima, lo esperaba una recepción multitudinaria. Su energía y juventud despertaba el entusiasmo del pueblo. Era el inicio del llamado tercer militarismo del Perú.
Junta de Gobierno Militar
Luis Miguel Sánchez Cerro organiza una junta de gobierno el 29 de agosto de 1930, la cual preside. La junta de gobierno ejecuta algunas medidas con tildes populistas, como la eliminación de la ley de reclutamiento vial. Además convoca a elecciones presidenciales para agosto de 1931.
Sánchez Cerro de la junta de gobierno en marso de ese año, con la ambición de presentarse como candidato presidencial.Sánchez Cerro gana las elecciones con su partido Unión Revolucionaria. Dejando en el segundo lugar a Víctor Haya de la Torre.
El 8 de diciembre de 1931 Sánchez Cerro inicia su gobierno, el cual estuvo marcado por una suerte de guerra civil, promovida por el aprismo, que envolvió al Perú en 1932.
Muerte de Sánchez Cerro
La causa de la muerte del presidente Luis Sánchez Cerro fue por magnicidio. El asesinato se produjo el 30 de abril de 1933, en el campo conocido como hipódromo de santa Beatriz, en la actualidad Campo de Marte.
Muerto por arma de fuego empuñada por el joven militante del partido de la APRA, Abelardo Mendoza Leiva. Quien le disparo tres balazos por la espalda asesinándolo casi en el acto.
El Argumento Político
Luis Sánchez Cerro se había ganado el apoyo de las masas populares del Perú, tras haber derrocado al gobierno del oncenio de Leguía en 1930. Pero muy pronto se asoció a la elite social del país, pasando a formar parte del exclusivo Club Nacional.
El sector oligarca del país vio en Sánchez Cerro a un candidato que los podía representar. Además contaba con el apoyo popular y respaldo de las fuerzas armadas. Este candidato representaba la antítesis de la ideología comunista que seguía el partido de la APRA.
Es así como se funda la Unión Revolucionaria con un enorme arraigo popular, que proclama a Sánchez Cerro a las elecciones de octubre de 1931. El partido aprista postula a Víctor Haya de la Torre, el candidato de la Coalición Nacional sería Arturo Osores, y José María de la Jara por el partido Unión Nacional.
La descendencia mestiza y la condición de provinciano de Luis Sánchez Cerro, provocaba pasiones entre la clase obrera y media citadina. El candidato mostraba una clara vocación nacionalista, típica de un militar con ansias de poder. Muy contrarias a la ideología copiada del extranjero representada en el aprismo y su comunismo.
La victoria de Luis Sánchez Cerro fue contundente, pero mientras que de La Jara y Osores reconocían su derrota, los apristas denunciaban fraude electoral.
Este fue el origen de la tirria del aprismo contra Sánchez Cerro. Desatándose en el país una violencia que tuvo su espacio más determinante en la Revolución Aprista de Trujillo en 1932.
Posteriormente el presidente fue víctima de un atentado contra su vida al salir de misa en la Iglesia Matriz de Miraflores. Un joven del APRA le disparó por la espalda y el presidente se salvó de milagro. Pero estos hechos de 1932, sería el preludio del magnicidio de Sánchez Cerro.
El Magnicidio de Sánchez Cerro
Luis Sánchez Cerro realizaba una inspección militar a las tropas en el entonces hipódromo de santa Beatriz, el 30 de abril de 1933 y lo hacía en un vehículo descubierto.
En el asiento trasero del vehículo se encontraban el presidente Sánchez y el primer ministro José Matías Manzanilla, en el puesto del copiloto se sentaba el coronel Antonio Rodríguez, jefe de Casa Militar. A los lados del vehículo presidencial trotaban algunos lanceros del cuerpo de caballería del ejército.
La hora del momento se posicionaba alrededor de la una de la tarde, cuando un joven se dirige corriendo hacia el coche, salta sobre el estribo y comienza a disparar.
Acto seguido estalla el tiroteo, el magnicida Abelardo Mendoza Leiva es capturado y acribillado a tiros, así como por las lanzas de los escoltas.El presidente es trasladado de urgencia al Hospital Italiano ubicado en la actual avenida Abancay, muriendo instantes más tarde.
El informe médico posterior al fallecimiento determinó que hubo dos clases de disparos sobre Sánchez Cerro. Uno con bala de menor calibre y en sentido de arriba abajo, un segundo de mayor calibre, con impacto mortal en el sentido de abajo hacia arriba.Este último tiro según relata el informe, se había hecho a muy corta distancia ocasionando una hemorragia de consideración.
Mendoza Leiva hizo los disparos de arriba abajo con un arma de calibre 45, disparando trepado en el estribo y por encima de Matías Manzanilla. ¿Quién entonces realizó los disparos de abajo arriba?
Además el coche presentaba perforaciones del lado contrario de la ubicación de Mendoza Leiva. Todo pareciera indicar que el asesinato no fue un acto espontáneo, personal y anarquista.
Posterior a la muerte
Nunca se pudo comprobar la participación del partido aprista, en el hecho del magnicidio del presidente Sánchez Cerro. Oficialmente se declaró que el joven Mendoza, actuó de forma individual.
Muerto El presidente Luis Sánchez Cerro, el Congreso de la República del Perú designa al general Oscar R. Benavides como presidente hasta ser completado el período presidencial del fallecido.Este nombramiento manifestó una violación constitucional, enmascarada tras la invocación de una situación de emergencia política en el Perú.
El llamado tercer militarismo continuaba en el país. Se maneja en el Perú el rumor de que Benavides quemó mucha documentación sobre información al magnicidio.El velatorio de Sánchez Cerro se realizó durante los días del primero al 4 de mayo, en la capilla del Sagrario, en la Catedral de Lima.
Fue una celebración multitudinaria, contó con la presencia de muchos hombres y mujeres de todas las edades, de toda condición social, que acompañaron el velatorio del cuerpo y su posterior sepultura en el cementerio Presbítero Maestro.
Gobierno de Luis Sánchez Cerro
El periodo de gobierno de Luis Sánchez Cerro, se desarrolló en un Perú sumergido en una intensa violencia política. Es esos tiempos surgían nuevas organizaciones políticas, y otras se fortalecían.
De estas organizaciones, se destacaban sobre los demás el partido del APRA y el partido de gobierno que era la Unión Revolucionaria.Ambos totalmente antagónicos, condición que puso al país a tan solo nada, de ocasionar un estallido de guerra civil.
Fue en el gobierno de Luis Miguel Sánchez Cerro, donde se produjo el recrudecimiento del enfrentamiento de las dos posiciones políticas.Durante esta gestión acaecieron diversas rebeliones del aprismo en todo el territorio nacional, tales como:
– La sublevación de un pequeño sector de la marina en 1932. Motín generado en la zona del Callao.
– El movimiento de insurrección de Huaraz, al frente del mayor del Ejército Raúl López Mindreau.
– La sedición de Cajamarca, liderada por el Zorro Jiménez.
– El movimiento conocido como la Revolución de Trujillo el 7 de julio de 1932. La cual fue la más sangrienta durante el gobierno de Sánchez Cerro.
Al gobierno de Luis Sánchez Cerro, también le atañó el problema que se desato con Colombia. Debido a que un grupo de pobladores del Departamento de Loreto, deciden actuar por su propia cuenta, a fin de recuperar los territorios que el Perú había perdido luego del tratado Salomón – Lozano firmado por el expresidente Augusto B. Leguía.
Revolución de Trujillo de 1932
Este movimiento de insurrección se enciende el siete de julio de 1932 en la región de Trujillo. Manuel Barreto Risso, apodado como el Búfalo Barreto lideraba una tropa de obreros y estudiantes, que asaltaba al cuartel de artillería Ricardo O’Donovan de Trujillo. El oficialismo como respuesta al asalto de las masas de obreros y estudiantes, bombardea la ciudad.
Posteriormente la ciudad fue tomada, luego de una cruenta e intensa batalla. Los participantes civiles de este movimiento de sedición fueron fusilados en Chan Chan.
Constitución de La República del Perú de 1933
Durante la administración de Luis Miguel Sánchez Cerro, se dio la conformación de una nueva constitución política del Perú que se promulgó en abril del año 1933.
Una de las reformas de la nueva constitución, era la negativa a una reelección inmediata del presidente. Además de la ampliación del período presidencial a seis años continuos.
Se le dio el carácter obligatorio y secreto al voto, limitándolo solo a hombres alfabetizados mayores de 21 años.
Se imponía la pena de muerte, aplicable a los casos de traición y sedición a la patria, así como al homicidio calificado.
Otras de las disposiciones que se contemplaron en esta carta magna del Perú fueron las siguientes:
– Permitió a las cámaras legislativas la jurisdicción de eliminar gabinetes ministeriales e incluso de privar de su cargo al presidente.
– Conservó el centralismo de la administración de Estado, no obstante le dio autonomía económica y administrativa a los municipios.
– Declaración de la libertad de cultos.
– Consideró el habeas corpus.
https://www.youtube.com/watch?v=QNLARJrxVa4
Aspecto político
Luis Sánchez Cerro lidero en su tiempo un movimiento político a través de su partido Unión Revolucionaria. Este movimiento político implicaba el proceso del establecimiento de un populismo conservador, con un cierto carisma enmascarado.
En este contexto Sánchez Cerro desplegó un gobierno dictatorial, el cual rebosaba un carácter autoritario y a la vez populista. Gestión propia de la época del Perú denominada como el tercer militarismo, marcado por un proyecto político ideológico totalitario.
Las características centrales de la política del gobierno de Luis Miguel Sánchez Cerro iban de la mano de su partido Unión Revolucionaria. Dejando una huella fascista en su agitado y sórdido gobierno y en la convulsionada década de 1930 en el Perú.
Gobierno que se presentaba como uno de los más organizados, con la más clara ideología ortodoxa, así como uno de los de mayores multitudes en latino América.
La política del Partido Unión Revolucionaria
Luis Miguel Sánchez Cerro, funda el partido Unión Revolucionaria en la ciudad de Lima el 30 de julio de 1931. En su origen tendría un carácter esencialmente organizador de la fuerza política del propio fundador. Así como de los diversos sectores populares que apoyaban la campaña política electoral de Sánchez de 1931.
Es así como en el período de julio de 1931 hasta abril de 1933, la figura de Luis Sánchez Cerro, instituye el foco central de la actividad política de aquella mezcla de sectores de la sociedad peruana.
Por lo que es fundamental la proyección carismática de este personaje, por la unión con determinados intereses de la oligarquía, básicamente representados en los agroexportadores. Quienes desde la autocracia y desconfianza inicial de Sánchez Cerro, lograr establecer relaciones afines de poder de poder, encabezadas por el total rechazo a los partidarios del aprismo.
De esta forma la propiedad populista – conservador de los sanchecerristas, entre los años 1931 y 1933, fue el sustento político, e ideológico del acontecer autoritario del régimen de Sánchez.
El autócrata Luis Miguel Sánchez Cerro, en todo el tiempo de tan breve período de gobierno, mantendrá en acción a la gran heterogénea multitud de sectores enardecidos y aliados, tanto en la capital como en todo el interior del país.
Medidas Políticas durante su Gobierno
A partir de mayo de 1932 hasta comienzos de 1933, la unión revolucionaria se dogmatiza como como partido político, agregando a su lista una variedad de sectores populares adeptos a Sánchez Cerro. Los cuales fueron captados en el acoplamiento de los comicios electorales de 1931.
Se reafirma entonces la unión revolucionaria en su carácter populista – conservador, pero bajo un nuevo escenario, un gobierno con rasgos muy bien definidos de autoritarismo, o dictadura.
Este tipo de régimen dictatorial queda manifiesto, en la ley de emergencia, con vigencia desde febrero de 1932. La cual combatía al partido del APRA, con la ilegalización de esta organización y la inmediata expulsión de los parlamentarios apristas.
Además de la deportación de los principales miembros del APRA, y la persecución de todos sus seguidores. Se sobreviene entonces para el Perú una dictadura, personalizada por su primer mandatario.
En este escenario, se da la evolución del régimen autoritario con marcada subjetividad o parcialidad a los intereses del líder del gobierno. Y desde estas condiciones, a Sánchez Cerro le toca enfrentar la Revolución de Trujillo en julio de 1932.
Además de otros movimientos de conspiración, originados desde el seno del APRA y orquestados en la clandestinidad. Era una época de dramatismo y frontal fraccionamiento político en el país.
Otras de las medidas políticas más relevantes del gobierno de Sánchez Cerro, que se pueden mencionar son la clausura o cierre de los diarios de carácter opositor, así como también la Universidad Mayor de San Marcos, en Lima, por la desconfianza de insurrecciones estudiantiles.
Obras de Luis Sánchez Cerro
Pese a lo convulsionado del ambiente interno del país, por las luchas que se debatían entre los sectores políticos y sociales. Durante el gobierno del presidente Luis Miguel Sánchez Cerro, se ejecutaron obras de relevancia e importancia, en diversos aspectos. Veamos a continuación algunas de ellas.
En el Sector de Obras Públicas
En el ámbito de ejecución de obras públicas, Luis Sánchez Cerro dispuso la construcción de las carreteras, Lima – Canta, Paita – Piura, así como la construcción y creación de modernas escuelas públicas nacionales, con capacidad para mil alumnos cada una. Además de otras obras civiles como:
– La construcción de restaurantes populares
– Construcción del Hospital de Sanidad de Las Palmas
– Se edificaron noventa centros educativos, además de la inauguraron de escuelas técnicas especializadas, en todo el Perú.
– La continuación del asfaltado de la carretera Central, también se dio inicio a la construcción de la carretera Huánuco – Pucallpa. La cual fue terminada en 1943.
– Construcción de la vía de Canta a Huánuco y la de la frontera de Puno.
– Se ejecutaron caminos en el litoral peruano, como el de Sullana a Tumbes y el de Talara a Tumbes.
– En materia de riego se atendió en mayor escala el sector de las pampas de La Joya en Arequipa.
En el Sector de la Economía
Luis Sánchez Cerro durante su gestión se reestructura el banco central de la reserva y el banco industrial. La eliminación del impuesto a la sal.En el campo minero, analizó la posibilidad de nacionalizar la minería. Decretó la ley de protección a las cuadrillas para los lavaderos de oro y liquidó los derechos de minas. Otros de los logros en materia económica se pueden mencionar:
– Protección de la industria, en especial la pesquera, poco desarrollada en esa época.
– Recuperación de la administración de los muelles, beneficiando al Estado. Mediante la revisión de los contratos existentes con las empresas administradoras.
– Inhabilitó el monopolio de los fósforos.
– A fin de solventar la crisis económica del país, se establece un convenio con expertos financistas americanos, con fines de asesoría en este tema. De todas las medidas económicas resultantes de la asesoría, solo fueron escogidas algunas, entre ellas la Ley de Bancos.
– El trasladó de la capital del departamento de Junín a Huancayo.
En el ámbito Social
El presidente Sánchez Cerro se planteó la necesidad de suavizar la migración desde los pueblos del interior a las ciudades. Atendiendo las necesidades de las comunidades rurales. En este aspecto, también se elaboraron proyectos para la colonización paulatina de las áreas selváticas del país. Otras de las obras relevantes dentro de lo social se pueden mencionar:
– Fortalecimiento de la legislación a favor de los indígenas
– Se otorgó al sector obrero el descanso remunerado por el día del trabajador. Así como la clasificación del horario de verano para obreros y empleados
– Determinación del periodo de vacaciones para los obreros.
– Contratación individual del trabajador.
– Fue eliminada la ley de reclutamiento vial, conocida como la “Mita Republicana”. Dicha ley había sido decretada por el gobierno de Augusto B. Leguía. La cual consistía en la obligación de la población, más que todo la indígena, para trabajar en la ejecución de las obras viales del país.
Esta decisión reivindicativa favoreció a dar popularidad al presidente Luis Sánchez Cerro.
En la Defensa Nacional
El presidente Luis Sánchez Cerro, viendo la posible amenaza de un conflicto bélico con el país de Colombia, crea la Jefatura Superior de Defensa Nacional, acompañada de la Junta Económica de Defensa.
Estimula, además la construcción de nuevos cuarteles militares en los territorios de La Perla, Juliaca e Iquitos.Proporciona al ejército y a la policía equipos adquiridos por el gobierno. Así como el intento de renovar el armamento bélico de las fuerzas armadas del Perú.
En materia legal, se instauró el Tribunal de Sanción Nacional para el juicio de los casos de enriquecimiento ilícito durante el mandato de Leguía.Se disuelven la organización sindicalista Confederación General de Trabajadores del Perú, con tinte comunista. Esta eliminación se llevó a cabo por decreto en fecha 12 de noviembre de 1930.
A favor de la moral y buenas costumbres se prohíbe por disposición legal, el juego de envite.Se dicta el decreto mediante el cual, se obligaba a los funcionarios públicos a declarar sus bienes.