Gonzalo Córdova un ilustre Legislador que ocupó el cargo de diplomático como representante en la nación ecuatoriana, fue un hombre que marcó la historia de su País cuando en los comicios presidenciales llevados a cabo en el año de 1924 quedara electo presidente de Ecuador para llevar las riendas administrativamente durante el periodo que partió desde el año de 1924 a 1925, tan importante como Alfredo Baquerizo Moreno.
¿Quien fue Gonzalo Córdova?
Reseñar la vida de este ilustre hombre que fue un excelente Legislador y representante es de mucha importancia porque nos lleva a realizar un hermoso recorrido por lo todo lo concerniente a su vida, saber que nació en la ciudad de Cuenca el 20 de julio del año de 1863, que fue hijo de don Joaquín Fernández de Córdoba y Cobo con doña María Teresa de Rivera y Cortázar.
Su linaje vino de una clase extraordinaria pues, pertenecía a familias excepcionalmente reconocidas, sus padres le dieron una consideración única para darle capacitación e instrucción extremadamente cautelosa: la verdad sea dicha, cada uno de sus periodos de estudios los realizó en las mejores escuelas del lugar donde creció, emergiendo en ellas como un estudiante devoto y espléndido. Experimentó muchas vivencias en su infancia, creciendo en un ambiente de condición antigarciana y dinámica.
Más tarde hizo un viaje a Quito para inscribirse en la Universidad Central, donde con las mejores notas alcanzó el título de Doctor en Jurisprudencia, uniéndose luego al prestigioso Colegio de Abogados de la República, donde engranó muy bien.
Fue devoto y fiel seguidor de Eloy Alfaro, y también ocupó el cargo de ministro de Hacienda en la legislatura principal de Leónidas Plaza. Comenzó a mediar en cuestiones legislativas nacionales bajo la seguridad de la filosofía liberal, que era su único banderín de batalla, llegó a involucrar posiciones abiertas extremadamente altas dentro y fuera de la nación.
En algunos eventos había practicado las funciones como Ministerio del Interior y fue a partir de esa circunstancia que indicó la inmovilidad, la habilidad, la pericia, la técnica y el orden. En el campo estratégico o lo que llamamos diplomacia sus actividades le habían otorgado una eminencia universal innegable: cuando fue Delegado en la República de Venezuela, su trabajo consideró el nombre de la nación como valioso e importante.
Luego, cuando dio comienzo la primera guerra mundial en el año de 1914, cada una de las naciones del Continente Americano envió designaciones a la capital de los Estados Unidos, entre ellos destacó Gonzalo Córdova en representación por el Ecuador, con su honestidad de contraste disertó las propuestas que, en beneficio del continente calaron completamente dando como deducción el reconocimiento absoluto en su totalidad al traer resultados considerables que le darían más distinción a la nación.
Biografía de Gonzalo Córdova
Dentro de las crónicas más sonada del Ecuador se tiene que Gonzalo Córdova nació en la espléndida demarcación de Cuenca en el año de 1863. Descendiente de una familia bastante reconocida y refinada, que experimentó la infancia en un espacio en total contradicción con el presidente García Moreno quien fuera progresista y dinámico. Hijo de unos padres excelentes como lo fueron don Joaquín Fernández de Córdova y Cobos y María Teresa de Rivera y Cortázar, padres dignos de admiración y respeto que supieron orientar a Gonzalo en su vida.
Trayectoria política
En su trayectoria política se reconoce que fue un hombre fiel a sus ideales tanto así que siguió muy de cerca la vida de don Eloy Alfaro, realizando además trabajos que a la postrer temporada le contaría como importante, por lo que se desempeñó muy bien como miembro de la administración en el gobierno principal de Leónidas Plaza.
Habiendo permanecido como una posibilidad de postularse para la administración gubernamental de la República en el año de 1920, no fue elegido como resultado de su antiguo radicalismo liberal. No obstante, ganó las propuestas electorales cuatro años después, aplastando al moderado Jacinto Jijón Caamaño y al escudero Coronel Juan Manuel Lasso quienes eran sus oponentes en esas propuestas para llegar a la presidencia.
Encargado del poder
Fue en el año de 1918 cuando fue favorecidamente electo Presidente del Senado, y en ese límite se enrumbaba hacia la Presidencia de la República lo cual fue una meta alcanzada, y como responsable encargado del poder lo asumió del 8 al 17 de octubre y del 4 al 7 de noviembre, en medio de la rutina de gobierno del Doctor Alfredo Baquerizo Moreno. Destacó entre sus la emergencia de la degradación de la moneda como pieza fundamental.
Fallecimiento
Es también importante tener en cuenta que luego de suscitarse el momento cuando fue derrocado, se nota que se fue del País, viviendo en el exilio muere tres años después del hecho, en Valparaíso, Chile, el 13 de abril del año de 1928. Vea Galo Plaza Lasso
Legado
Superó todas las expectativas como un fantástico autor en sus más notables escritos, laboró como columnista, fue un gran educador, ensayista, ocupó cargos como diputado, representante del senado, líder de distritos, gobernador, subsecretario de Relaciones Exteriores, ministro de Cortes, canciller delegado y consejero.
Hombre de increíble capacidad, amigable, vivaz, muy sencillo jamás fue altivo, excepcionalmente amable. Cuando le tocaba bajar la cabeza lo hacía sin sentir ninguna vergüenza, pues sus principios le enseñaron a vivir cada etapa de su vida con mucha sabiduría y madurez.
Gonzalo Córdova como Presidente del Ecuador
En medio de su administración gubernamental, tuvo que enfrentarse a la resistencia de los moderados opositores, quienes bajo Jacinto Jijón Caamaño se rebelaron solo once días después de ponerse a trabajar en los asuntos políticos que le asignaban a medida que avanzaban con sus planes. También soportó los asaltos de la reunión de inconformistas mezclados, que eran liderados por el industrial Luis Napoleón Dillon, precursor en el año de 1922 de la planta de fabricación de texturas la Internacional.
Se consideró además que había otro sector opositor que se originó en una reunión de progreso de soldados, acumulada ideológicamente alrededor del periódico El Abanderado, que iba a cargo del teniente coronel dimitido Víctor M. Naranjo. A partir de ese momento surgió la «Liga Militar», formada por oficiales jóvenes que defendieron una restauración social y financiera de la nación.
Fueron impactados en una medida limitada por el comunismo y en su mayoría por la dirección de la Misión Militar Italiana, empapada con el patriotismo de Mussolini. Esto, junto con la debilidad física de Córdoba, después de cinco meses de gobierno, fue necesario que se mudara a Guayaquil, dejando al frente al gobernante interino Alberto Guerrero Martínez para que se encargara de la administración del gobierno.
A la ruda situación que atravesaba la nación con la emergencia monetaria y su propio sistema de creencias de la antigua estampilla liberal, mínimo ajustado que se adecuaba a las progresiones que estaban madurando en la cultura ecuatoriana, fueron estos actos los que provocaron la rebelión del 9 de julio del año de 1925, conocida como la reconocida Revolución Juliana.
Gobierno de Gonzalo Córdova
Durante su tiempo de gobierno se conspiró para evitar que Gonzalo Córdova asumiera el mandato de la nación, sino durante diez meses pero en realidad, solo fueron once meses: la emergencia monetaria, la resistencia de los llamados conservadores y los innovadores, su propia filosofía de un viejo estilo liberal, su indigno bienestar.
Y sobre todo la causa del impacto ocasionado con todo el efecto de la destrucción de noviembre del año de 1922 en el alma de los jóvenes y dinámicos oficiales de las Fuerzas Armadas. Por lo que Gonzalo Córdova se puso manos a la obra el 1 de septiembre del año de 1924. El Doctor Córdova estaba muy enfermo, tenía una enfermedad coronaria.
La autenticidad de su triunfo en la designación comenzó a ser examinada en el Congreso, hubo fallos debido a desafíos, se inició el esquema, primero fue el tradicionalista encabezado por Jacinto Jijón y Caamaño, con su dinero en práctico compró armas y preparó organizaciones extremistas, asaltadas desde el ala norte de la nación, y en José del Ambi, uno de esos combates fue combatido, las tropas conservacionistas fueron derrotadas por los militares.
El Chachán inundó obstruyendo siete kilómetros de vía férrea, fue un momento my crucial porque se quiso cerrar la boca a la prensa de la resistencia opositora la cual fue encarcelada y numerosos columnistas fueron detenidos: Jacinto Jijón y Caamaño y Juan Manuel Lasso fueron vencidos y derrotados.
La firma hecha en Washington del Acta Tripartita por los Plenipotenciarios de Perú, Colombia y Brasil fue rechazada por la ciudadanía, lo que garantizó el respaldo del Tratado Salomón-Lozano, destructivo para los intereses regionales del Ecuador.
Financieramente, la nación se encontraba en una emergencia desconcertante debido a la degradación del efectivo, como resultado de los problemas no respaldados y la no convertibilidad de los billetes. Había mucha teoría, la importación a gran escala de cosas extravagantes que favorecían los bancos. Durante un par de días, el vicepresidente Temístocles Terán también tomó asiento ocupando la presidencia.
La gran importancia de lo que significaba la nacionalización del Transandino o Ferrocarril del Sur, en términos rentables para la nación, fue un triunfo. El ministro de Hacienda Miguel Albornoz enviado extraordinario en pleno movimiento para la liquidación y uniformidad de la Hacienda Pública.
Ibarra tenía agua de consumo, se introdujo de manera bien estructurada la carretera Loja-Portoviejo, en Riobamba se creó otra estación de ferrocarril, en Santa Rosa el necesario y requerido Hospital. Hasta que el presidente Córdoba que se encontraba en Guayaquil por la condición de bienestar y solución medicinal, hacia fines de mayo del año de 1925 que estaba en Quito.
Asimismo tuvo que enfrentarse a la oposición de los liberales socializadores, quienes tenían un objetivo bastante primordial exponente que fue el político e industrial de Quito, Luis Napoleón Dillon. Córdoba lo había nombrado ministro de finanzas, pero, según la prensa de montaña, Dillon no había obtenido la aprobación del Banco Comercial y Agrícola de Guayaquil que prácticamente se decidió por la política del gobierno.
En el año de 1922, ocurre un evento en el cual Dillon organizó la Sociedad Internacional de Crédito en Quito con la finalidad de darle curso a la moneda en la Sierra. «La sociedad ya había impreso y registrado sus billetes», escribe la historiadora Linda Alexander Rodríguez, «cuando Francisco Urvina Jado quien era el gerente de la entidad bancaria comercial y agrícola, se enteró de que los billetes no eran compatibles.
Y para «proteger la moneda nacional» logró comunicarse con el ministro de Hacienda, Alfonso Larrea, para que negara el tráfico de estos billetes. Por estas razones personales y también regionales e ideológicas, Dillon condenaba la preponderancia de Guayaquil y especialmente a Urvina Jado. Vea Guillermo Rodríguez Lara
Además se destaca que el reconocido Dillon redactaba habitualmente en el periódico la Antorcha del círculo socialista que llevaba el mismo nombre y desde recinto manifestaba contra la corrupta preponderancia costera y exigía una transformación social. La oposición que se había levantado contra Córdoba procedía cada vez más con más ahínco, además, del diario el Abanderado, que era dirigido por el teniente coronel en servicio distante Víctor M. Naranjo.
Cabe además mencionar que entre sus lectores se encontraban los militares, a los que Naranjo clasificó en dos clases en las que estaban los funcionarios políticos como Leónidas Plaza, quienes se ocuparon de sus intereses, y m por el otro lado estaban los oficiales profesionales como el general Francisco Gómez de la Torre, preocupados por el destino de los ecuatorianos.
Pidió además la creación de un nuevo ejército, solicitud que fue concedida, porque se creó la gran Liga Militar, compuesta por jóvenes oficiales que apostaban por la transformación social y económica del Ecuador. El socialismo influyó en ellos y también la mística «Marcha sobre Roma» en el año de 1922 y el nacionalismo de Benito Mussolini, quienes manifestaban sus propuestas justo desde las bocas de los instructores de la Misión italiana cuyo fin era protagonizar los cambios.
Es por ello que la Junta Militar chilena que destituyó al presidente Arturo Alessandri Palma en el año de 1924 fue el patrón que expusieron con el fin de continuar tan pronto como se presentara la ocasión.
La administración de Córdova se iba a hundir debido a los tantos conflictos presentados por los tantos problemas que resolver en el País. Después de cinco meses de manejo, tuvo que irse a Guayaquil por razones de salud. La estancia en esa ciudad incrementó el temor de Serrano de que Córdoba fuera cautivo de la plutocracia.
El presidente del Congreso, Alberto Guerrero Martínez, quien aspiró a la presidencia de la República en el próximo período, gobernó entre febrero y junio del año de 1925, mientras que Córdoba estuvo ausente. Guerrero fue duro con la oposición: desterró a Jijón y Caamaño y al Coronel Lasso. Logró que el Congreso aprobara la compra del 75% de las acciones de la Empresa del Ferrocarril Guayaquil-Quito en abril del año de 1925 y presidió la junta de accionistas.
La entidad bancaria Comercial y Agrícola facilitó el dinero, creándose con ello la deuda pública interna con esa entidad bancaria, que en el año de 1913 era de 4, 907,000 sucres y que lo aumentó a 27, 262,496 en el año de 1925. El déficit fiscal había alcanzado los nueve millones y medio de sucres. Las importaciones fueron ostentosas y fueron alentadas por el banco.
En medio de su administración, tuvo que enfrentar la resistencia de los inconformistas mezclados, cuyo ejemplo fundamental fue el político y mecánico de Quito, Luis Napoleón Dillon. Córdova lo había nombrado Ministro de Finanzas, en cualquier caso, según la prensa de montaña, Dillon no había adquirido la aceptación del Banco Comercial y Agrícola de Guayaquil, que básicamente eligió el acuerdo del Gobierno.
Se destaca que Córdoba tuvo que irse después de cinco meses de la junta a Guayaquil por razones de que su salud empeoraba aun más. La estancia en esa ciudad amplió el temor de Serrano de que Córdoba era un detenido de la plutocracia.Vea José Luis Tamayo
El total de cada una de estas condiciones produjo el derrocamiento evento que ocurrió el 9 de julio del año de 1925, el cual fue conocido como la Rebelión Juliana. Córdova fue detenido y el 23 de agosto del año de 1925 fue a alojarse en Valparaíso, Chile, País en el que termina falleciendo a la edad de 65 años en marzo de 1928.
La inquietud se desarrolló justamente cuando, en marzo del año de 1925, se descubrió que Brasil, Colombia y Perú habían convenido en firmar un Acta tripartita el 24 de marzo del año de 1922 y que, mediante el Tratado de Salomón-Lozano, Colombia se había rendido a los distritos del noreste del Perú que habían sido ecuatorianos hasta el año de 1916.
El año en que Ecuador los había trasladado a Colombia en el Tratado de Límites Definitivos Muñoz Vernaza – Suárez. A pesar de que Ecuador no conocía el contenido del Tratado de Salomón-Lozano hasta octubre del año de 1925, la información de que Perú se presentó como una palanca entre Colombia y Ecuador en la periferia del noreste lo cual movió los ánimos y debilitó al Gobierno.
Mientras atendía a Aysén, esto fue lo que motivó a Paita cuando dijo: ‘Lo que pido es que con una minuciosidad tan similar a la que se ha utilizado conmigo, sea la que condenen a esa banda / desfile de forajidos que han robado la Nación a la sombra de mi nombre. Vea José Joaquín Olmedo
Revolución Juliana
La reconocida Revolución Juliana fue un levantamiento militar metropolitano que se produjo en Ecuador el 9 de julio del año de 1925. Ese día, una reunión de oficiales militares jóvenes, llamada Liga Militar, derrocó a la administración dirigida por Gonzalo Córdova. Debido a la imperiosa revuelta, la nación pasó a ser administrada de manera arbitraria por una Junta de Gobierno, formada por 8 personas.
La época de la Revolución de Juliana se prolongó hasta el mes de agosto del año de 1931. En medio de esos años, el Ecuador estuvo representado por dos Juntas Directivas temporales, por un tiempo de administración practicado por Isidro Ayora así como por una administración protegida involucrada por el mismo Ayora. Hacia el último tramo del siglo anterior, Ecuador tuvo un problema importante con la obligación financiera.
Sus propios bancos eran responsables de otorgar los créditos y su capacidad había resultado ser excelente, hasta el punto de que, prácticamente hablando, controlaban la administración gubernamental. Este problema se irritó por la costumbre de estos bancos de ofrecer dinero sin garantía de oro. Las administraciones de gobierno que surgieron de la Revolución de Juliana intentaron concluir este marco plutocrático. Su fin fundamental era su deber de modernizar la nación, tanto en el campo monetario como en el social.
Causas
Como lo indicaron los especialistas en historia, Ecuador comenzó a requerir avances casi desde su establecimiento como República en el año de 1830. Alrededor de ese momento, se vio obligado a solicitar a la banca privada y en particular, a la increíble banca de Guayaquil.
Esto se convirtió en el punto de acceso monetario para que los gobiernos progresistas solventaran los costos del estado. Además de otras cosas, los diversos gobiernos ecuatorianos mencionaron créditos de bancos privados para fabricar fundaciones en la nación.
Deuda impagable
Fue en el año de 1924 cuando el Estado ecuatoriano se vio tan obligado con la deuda al banco de Guayaquil que la cuenta era impagable. Dentro de los elementos prestamistas, surgió el Banco Comercial y Agrícola, administrado por Francisco Urbina Jurado.
La mayor parte del dinero que los bancos le prestaron al estado no contaba con ayuda de oro. Como regla general, eran facturas emitidas por los propios bancos, con la aprobación del gobierno, sin un apoyo presupuestario genuino. Esta capacitación, que inició el Banco Comercial y Agrícola, fue duplicada por otras fundaciones financieras.
Para estos, emitir los diversos billetes de la nada y prestarlas a la administración era un excelente negocio redondeaban muy bien. Después de un minuto específico, cada banco privado comenzó a emitir sus billetes propios, desde aquellas que sumaban un sucre hasta otras con una apreciación significativamente mayor.
Reacción ante la plutocracia
La circunstancia descrita anteriormente no hace mucho tiempo provocó una plutocracia legítima, la legislatura de los más extravagantes. Los innovadores bancos privados, a causa de la obligación con la gran deuda, se convirtieron en el verdadero poder en la sombra.
Algunas narraciones llaman a este marco «bancocracia», siendo el Banco Comercial y Agrícola de Guayaquil su imagen más significativa. Este elemento, que se unió a los bancos de Estados Unidos, ganó tanto poder que comenzó a emitir el dinero nacional.
En conclusión, podría tratar con la administración gubernamental voluntariamente, controlar el comercio de efectivo o desequilibrar la economía cuando le convenga. La gran Revolución Juliana detonó para intentar poner fin a esa circunstancia, restablecer la capacidad genuina de las organizaciones y esforzarse por hacer los enfoques ideales para las clases centrales y bajas.
Falta de democracia
El gobierno prevaleciente había apoyado una progresión de leyes que restringían las libertades abiertas. Por lo tanto, las reuniones políticas estaban prohibidas y la oportunidad de la prensa era inexistente. Por otra parte, numerosos especialistas mencionan que las decisiones solían ser arregladas para apoyar a los partidos gubernamentales dominantes.
Masacre de Obreros en Guayaquil
A pesar de que ocurrió tres años antes de que comenzara la Revolución de Juliana, la huelga de Guayaquil y la carnicería posterior se consideran como una de sus causas y mientras tanto, un ejemplo de la insostenible circunstancia de la nación.
En el año de 1922, la nación estaba experimentando una verdadera emergencia financiera, el cacao, el elemento fundamental que Ecuador envió y desarrolló en la costa, había descendido fuertemente. El costo típico de los artículos básicos se expandió y la inflación, es decir los costos, se expandieron de manera impresionante. La población no tenía recursos con los que soportar, lo que provocó que se compusiera con la disidencia de llevar a una fuerte protesta.
En el mes de noviembre del año de 1922, se había llevado a cabo una huelga general en Guayaquil. Comenzó a principios de mes y continuó hasta el centro de ese mes. El día trece, los huelguistas tomaron la ciudad. La reacción de la administración fue una masacre que asesinó a 1.500 personas.
Obras de Gonzalo Córdova
Una de sus primeras obras fue asumir el gobierno del País el 1 de septiembre del año de 1924, cuando comenzó la administración de la República, después de una función celebrada de entrega de orden gubernamental. La autenticidad del triunfo de Córdoba comenzó a ser discutida en el Congreso, hubo fallos debido a desafíos pues había comenzado la gran conspiración en contra de su mandato.
Dentro de las llamadas tropas conspiradoras estaba la conservacionista encabezado por Jacinto Jijón y Caamaño, quien con dinero de su propio peculio adquirió armas y preparó organizaciones radicales, atacó desde el norte de la nación y en San José del Ambi se enfrentó a uno de esos conflictos, superando a las tropas tradicionalistas por el ejército. .
Todo previamente trazado para que Gonzalo Córdova no asumiera el mandato ni gobernara, sin embargo, solo durante 10 meses y, a decir verdad, solo durante cinco meses: la emergencia financiera, la resistencia de los moderados y los modernizadores, su propia filosofía de una vieja estampa liberal, su degradada salud, su determinación o más todo el efecto de la destrucción de noviembre del año de 1922 en el alma de los jóvenes y dinámicos oficiales de las Fuerzas Armadas.
A partir de ese momento Córdoba administró con recursos excepcionales. Además, necesitaba enfrentar la resistencia de los inconformistas mezclados, cuyo tipo de principio era el moderno y político Quito Luis Napoleón Dillon. Se formó la Liga Militar, compuesta por oficiales jóvenes que buscaron la restauración social y monetaria del Ecuador.
Él prevaleció con respecto a lograr que el Congreso afirmara la compra del 75% de las ofertas de la Empresa del Ferrocarril Guayaquil-Quito en abril de 1925 y administró la reunión de los inversionistas. Córdoba necesitaba aplastar una resistencia moderada impulsada por Jacinto Jijón y Caamaño. Citando la injusticia del gobierno por la tergiversación de los constituyentes, él hizo la guerra, sin embargo, fue derrotado en San José del Ambi.